La empresa de autobuses Egenberger Mobil utiliza el eCitaro desde 2020 en una línea de transporte público de Augsburgo (Augsburger Verkehrs- und Tarifverbund (AVV)). Estábamos allí cuando el autobús eléctrico marcó los 300 000 kilómetros.

Las baterías se cargan antes de que el conductor Michael Schöneck desenchufe el conector y el eCitaro emprenda esta mañana su viaje en la línea de autobuses regionales 506 de la Augsburger Verkehrs- und Tarifverbund (AVV). El experimentado conductor de autobús se encuentra con su autobús eléctrico en un punto de carga del parque de innovación Sortimo en Zusmarshausen, una de las infraestructura de carga más grandes y modernas de Europa.

El parque de innovación de aspecto futurista se encuentra directamente en la salida de la autopista A8 de Zusmarshausen al oeste de Augsburgo, es decir, en la tangente suroeste entre Stuttgart y Múnich, y dispone de un total de 76 postes de carga, en su mayor parte cubiertos y sin barreras y también cuenta con áreas de descanso, zonas de compras y de aparcamiento.

La empresa de autobuses Egenberger Mobil de Thierhaupten, en la región bávara de Suabia, también utiliza la infraestructura de carga para su eCitaro.

En Egenberger Mobil se apostó desde el principio por la movilidad eléctrica y, junto con Daimler Buses, abordaron la conversión de la flota de autobuses a la propulsión eléctrica. Desde julio de 2020, dos eCitaro están en servicio, ambos equipados con baterías NMC1 de primera generación y, desde el lanzamiento, realizan el servicio de manera fiable con su primer paquete de baterías. Para uno de los dos autobuses hoy es una fecha especial, ya que durante el trayecto de la línea 506 el eCitaro completará el kilómetro número 300 000.

El trayecto empieza en Zusmarshausen. Los primeros pasajeros se suben, a algunos los saluda el conductor personalmente, hay un trato familiar: aquí se conocen todos, los pasajeros aprecian a su conductor y eso se nota rápidamente durante el viaje. Los pasajeros de este horario son personas que se desplazan al trabajo, pero también son personas que van a una cita médica o a comprar. Como se desprende de las conversaciones, ellos también valoran la comodidad del moderno autobús eléctrico. Los eCitaro de Egenberger Mobil están equipados con enchufes USB en cada asiento doble. Los asientos con respaldo alto y tapizado Softline también proporcionan confort, los reposacabezas están revestidos de cuero y tres monitores de 29 pulgadas informan sobre el recorrido de las líneas. Una particularidad de los autobuses de Egenberger es la rampa extensible que también está disponible en la entrada delantera, a través de la cual los pasajeros con movilidad reducida pueden subir cómodamente al autobús. Este también es un servicio muy bien valorado.

La lluvia se ha vuelto más intensa, pero no hay por qué preocuparse, ya que el eCitaro está equipado con los sistemas de asistencia y seguridad más modernos. «Tenemos a bordo todo el equipamiento de seguridad que puede incorporar el vehículo», afirma Paul Kienberger mientras el eCitaro se va acercando a Augsburgo. Allí se realiza una breve pausa, después da la vuelta y vuelve hacia Zusmarshausen. Aún no se han completado los 300 000 kilómetros. El trayecto de vuelta por el área rural, silencioso y casi como flotando, se ve interrumpido por las paradas establecidas en el recorrido. La sensación de conducción que uno tiene como pasajero a bordo del eCitaro es una experiencia especial, algo que también confirma Paul Kienberger: «Los conductores y los pasajeros no solo escuchan hablar de las diferencias del autobús eléctrico, sino que pueden experimentar la transformación de la movilidad con el eCitaro».

Objetivo conseguido: en medio del trayecto, mientras el eCitaro se desliza por una suave curva a la derecha, se alcanza el kilómetro número 300 000. El autobús eléctrico recorre los kilómetros adicionales de la línea de autobuses de forma fiable y silenciosa, al igual que los muchos kilómetros que ha recorrido antes. Cuanto más se aleja de Augsburgo, más se vacía el compartimento de pasajeros. Por último, vuelve al parque de innovación, donde el vehículo se dirige a la estación de carga. La puerta se abre y el conductor de autobús Michael Schöneck conecta el eCitaro a la estación de carga. Todos queremos gritar «¡Misión cumplia! A la pregunta final sobre lo que distingue al eCitaro, Paul Kienberger responde: «Excepto por el tipo de propulsión, el eCitaro tiene los mismos componentes que el Citaro, por lo que el personal de conducción y los pasajeros solo tienen que familiarizarse con el nuevo tipo de propulsión».