Mercedes-Benz persigue desde hace años la visión de una conducción sin accidentes. El concepto de seguridad integral abarca todas las fases de la seguridad de los vehículos a motor: la seguridad en la conducción y en situaciones de peligro, la protección en caso de accidente y la minimización de las consecuencias de los accidentes. La seguridad también viene de serie en los autobuses urbanos Citaro. La propia carrocería protege a los pasajeros frente a los impactos laterales. En caso de una colisión por alcance, la parte frontal reforzada minimiza las consecuencias de un accidente y protege mejor al conductor.

Citaro
Conducción segura
Seguro. Más seguro. Mercedes-Benz.
Desde ASR hasta vigilancia del compartimento de pasajeros.
En el tráfico urbano, los peligros pueden ser imprevisibles. De ahí la importancia de tomar medidas efectivas para prevenir accidentes. Mercedes-Benz ha equipado su autobús urbano Citaro con un sinnúmero de equipos de seguridad que le ayudan a salir airoso de situaciones críticas de conducción.
La mejor base para un alto nivel de seguridad es un conductor concentrado plenamente en el tráfico. Por ello, el Citaro LE (Low Entry) cuenta con un puesto de conducción especialmente ergonómico. En el Citaro, el conductor alcanza fácilmente todos los mandos y tiene una visión perfecta de todos los instrumentos. El cambio automático y la cámara de marcha atrás facilitan igualmente la conducción. El parabrisas Opticool y el equipo de aire acondicionado regulable por separado favorecen la concentración del conductor, por altas que sean las temperaturas.
Una situación típica: un balón que rueda a la calzada, seguido de niños jugando. Es necesario frenar en seco. El sistema antibloqueo de frenos (ABS) interviene de forma electrónica y precisa sobre los frenos para evitar que las ruedas se bloqueen de forma permanente. Una ayuda adicional es el sistema de frenos electroneumático (EBS), que acorta considerablemente la distancia de parada, pues los frenos reaccionan con mayor rapidez y precisión.
Programa electrónico de estabilidad (ESP®).
Así funciona el ESP®.
El programa electrónico de estabilidad (ESP®) es un sistema activo que aumenta la seguridad y estabilidad de marcha. Contribuye notablemente a reducir el peligro de derrape en tramos de curvas o maniobras de esquiva. En situaciones dinámicas críticas, las fuerzas de frenado de cada una de las ruedas se regulan de forma selectiva; por ejemplo, cuando el autocar se mueve en el margen crítico de la conducción en tramos de curvas. Simultáneamente, se reduce la potencia del motor. De este modo, se evita el posible «derrape» del autobús mediante un frenado dosificado con precisión dentro de las posibilidades físicas.
El ESP® controla, entre otras cosas, la aceleración transversal de los autobuses. Si el autobús alcanza un estado crítico de conducción en curvas largas, como salidas de autopistas, o cambia de carril rápidamente, la velocidad del vehículo se reduce automáticamente hasta que se restablece la estabilidad de marcha. El ESP® es comparable al sistema utilizado en los turismos, pero ofrece funciones adaptadas para su uso en autobuses.
El sistema de control de tracción (ASR).
El sistema de control de tracción (ASR) impide de dos modos que las ruedas motrices puedan girar en vacío. Por un lado, mediante una intervención precisa en los frenos de las ruedas. Por el otro, disminuyendo el par motor por medio del «acelerador electrónico». Con su ayuda, el motor entrega en situaciones críticas solamente la potencia que pueden transmitir las ruedas motrices: una ventaja importante a la hora de ponerse en marcha y al acelerar el vehículo.
Durante el arranque se supervisan el número de revoluciones y el par que actúa sobre cada una de las ruedas de los ejes propulsados. El procesador regula la distribución del par motor para reducir la tendencia de las ruedas a girar en vacío y asegurar un flujo de fuerza ideal en todo momento.
El ASR asiste al conductor al poner en marcha el vehículo y al acelerar, impidiendo que las ruedas motrices puedan patinar y originar un derrape lateral de la zaga (tracción trasera). El ASR aumenta el confort y la seguridad al iniciar la marcha en vehículos con motores de par elevado, especialmente si las ruedas no pueden transmitir el par recibido sobre calzadas de tracción desigual.
El sistema antibloqueo de frenos (ABS).
Funcionamiento del ABS. Cada una de las cuatro ruedas cuenta con sensores que miden el número de revoluciones y transmiten esta información a una unidad de control central. Si una de las ruedas tiende a superar el umbral de bloqueo durante el frenado, se modifica la presión del freno para mantener la fuerza de frenado por debajo de este umbral. Para ello se reduce y se aumenta la presión varias veces por segundo.
El sistema detecta las fuerzas que actúan sobre las ruedas al frenar y supervisa la rodadura. La fuerza de frenado que actúa sobre las ruedas se distribuye de modo que no pueda bloquearse ninguna rueda y que se conserve en la medida de lo posible la maniobrabilidad del vehículo.
En diciembre de 1970, Mercedes-Benz presentó el primer ABS controlado electrónicamente del mundo, lo que supuso toda una revolución para la conducción y la seguridad vial. Las intervenciones electrónicas selectivas en el frenado permiten evitar que las ruedas se bloqueen permanentemente. Esto minimiza el riesgo de perder la estabilidad direccional y permite dirigir el vehículo en el sentido de marcha deseado incluso durante un frenado en seco. La tecnología ABS constituye la base de sistemas electrónicos de seguridad más avanzados, como el programa electrónico de estabilidad (ESP®) o el servofreno de emergencia (BAS).
Sideguard Assist.
El asistente de giro Sideguard Assist incrementa considerablemente la seguridad de los usuarios de la vía vulnerables en zonas urbanas, pues ayuda al conductor a detectar a tiempo situaciones críticas al realizar giros. El sistema actúa en varios niveles: En un primer informa al conductor, en un segundo emite una advertencia adicional. Si se detecta un objeto en movimiento en un lateral del área de control, se ilumina una luz LED con forma de triángulo amarillo en el montante A del lado del acompañante. Este dirige la atención intuitivamente a la situación que se está dando junto al vehículo. Adicionalmente aparece una indicación de advertencia en el display central. En caso de que el conductor realice o continúe una acción que pueda desembocar en una colisión, se emite una nueva advertencia: la luz roja de diodos luminiscentes parpadea intensamente y se mantiene así. A esto se añade una advertencia por vibración en el asiento del conductor. Además, el Sideguard Assist avisa de la presencia de obstáculos detenidos en la curva en la que va a girar el autobús, pudiendo cumplir también la función de control de cambio de carril; en este caso funciona con la misma cadena de avisos.
Preventive Brake Assist.
Con Preventive Brake Assist, Mercedes-Benz ofrece la primera ayuda de frenado activa del mundo para autobuses urbanos de línea. Este sistema de asistencia emite una advertencia ante un riesgo de colisión contra peatones en movimiento, así como ante objetos inmóviles o en movimiento y, en caso de grave peligro de colisión, inicia automáticamente una maniobra de frenado con frenada parcial. La cascada de avisos y la intervención del freno están coordinados con exactitud para el tráfico urbano. En caso de peligro de colisión con peatones u objetos inmóviles o en movimiento, Preventive Brake Assist advierte al conductor tanto visualmente –mediante un triángulo rojo iluminado con símbolo de vehículo en la pantalla central– como acústicamente, e inicia al mismo tiempo una frenada parcial. La intervención se mantiene hasta que el conductor actúa o hasta que el vehículo se detiene completamente. La base de Preventive Brake Assist es una nueva generación de tecnología de radar: el sistema de radar tantea constantemente una zona de hasta 250 metros delante del vehículo y trabaja con fiabilidad también durante la noche y con clima adverso.
La luz de giro.
La luz de giro ofrece una mayor seguridad pues mejora la visibilidad de noche al girar en intersecciones, rotondas o al efectuar maniobras hacia delante o marcha atrás.
La función se activa automáticamente a velocidades de hasta 40 km/h aprox. cuando se conectan los faros principales, se acciona la palanca de los intermitentes o se gira el volante. Al hacerlo, se conecta uno de los dos faros antiniebla para iluminar por delante del vehículo la zona lateral que no es iluminada por los faros principales. La electrónica inteligente conecta o desconecta la luz de giro con intensidad atenuada. De este modo, el ojo humano tiene la oportunidad de adaptarse al cambio de iluminación.
El singular control del ángulo de pandeo ATC del Citaro G.
Uno de los elementos clave del Citaro G es su articulación y su sistema de control, desarrollado por el Departamento de Investigación de Daimler, y que ha sido verificado hasta en el más mínimo detalle. El ángulo máximo de pandeo al girar a tope la dirección es de 54,5 grados. Otro ingenioso sistema es el singular control del ángulo de pandeo ATC (Articulation Turntable Controller), desarrollado íntegramente por Mercedes-Benz. El ATC establece un nuevo estándar de dinamismo y seguridad en los autobuses articulados.
Control del ángulo de pandeo, Articulation Turntable Controller (ATC): funciones y ventajas.
El control dinámico ATC regula la amortiguación hidráulica de la articulación de forma rápida y, sobre todo, en función de la situación: según el ángulo de orientación de las ruedas, el ángulo de pandeo, la velocidad y la carga. Para este fin, ATC se sirve de los datos del bus de datos CAN.
El resultado: mientras que en otros modelos la habitualmente elevada amortiguación básica de la articulación conlleva una fuerte tendencia a subvirar en curvas, así como un elevado desgaste de los neumáticos en el eje delantero, la articulación del vehículo se mueve casi con total libertad en condiciones de conducción normales y estables, por lo que el efecto de amortiguación es provocado únicamente por la fricción de los elementos.
Control de la presión de los neumáticos (TPM).*
El control de la presión de los neumáticos (TPM) sirve para advertir de una pérdida de presión en uno o varios neumáticos, tanto antes como durante la marcha. Cada neumático cuenta con un sensor, y la presión de todos los neumáticos se muestra en el visualizador multifunción.
Los neumáticos con una presión de inflado correcta duran más tiempo y, sobre todo, aumentan la seguridad. El control de la presión de los neumáticos puede ayudar a detectar la caída de presión en uno o varios neumáticos y, por consiguiente, a evitar en algunos casos consecuencias graves.
Para ello, un sensor en el interior del neumático mide la presión y la temperatura del aire. Los datos se envían de forma periódica por radio a una antena receptora situada en los bajos del vehículo, y de ahí a la unidad de control. Si lo solicita el conductor, el visualizador multifunción muestra la presión de cada neumático.
Todos los neumáticos pierden aire por difusión a lo largo del tiempo. El dispositivo de control de la presión de los neumáticos advierte a tiempo al conductor para que corrija la presión de inflado. Si se detecta una caída repentina de presión durante la marcha brilla un testigo de advertencia amarillo y se visualiza un mensaje de advertencia para que el conductor pueda reaccionar.
Vigilancia del compartimento de pasajeros.
Las cámaras de videovigilancia instaladas pueden supervisar lo que sucede en el interior del autobús. Un sistema de videovigilancia no solo aumenta la sensación de seguridad del conductor y los pasajeros, sino que puede registrar a vándalos que cometen actos de vandalismo o violencia en el autobús.
Los datos se transmiten al monitor situado en el puesto de conducción. El conductor puede entonces ver y evaluar mejor determinadas situaciones y sucesos que se producen en el compartimento de pasajeros y reaccionar en caso de peligro.
El vehículo está provisto de los pictogramas correspondientes, que indican a los pasajeros que se trata de un vehículo equipado con sistema de videovigilancia. Con este sistema, aumenta la sensación subjetiva de seguridad de conductor y pasajeros y, con ello, se fomenta el uso del transporte público.
El sistema de videovigilancia está disponible como equipo opcional.
Nuestro asesor de ventas de autocares y autobuses le dará más información sobre el funcionamiento de la videovigilancia y el almacenamiento de datos.
* Equipamiento opcional